Juan Luis Guerra – El costo de la vida
Juan Luis Guerra – El costo de la vida
El peso que baja, ya ni se ve
Y las habichuelas no se pueden comer
Ni una libra de arroz, ni una cuarta e café
A nadie le importa qué piensa usted
Será porque aquí no hablamos inglés
Ah, ah es verdad
Ah, ah es verdad
Do you understand?
El peso que baja, ya ni se ve
Y la democracia no puede crecer
Si la corrupción juega ajedrez
A nadie le importa qué piensa usted
Será porque aquí no hablamos francés
Ah, ah vous parlez?
Ah, ah vous parlez?
Ah, ah non, Monsieur
En medio del mar y el cielo
Quinientos años después
Una raza encendida
Negra, blanca y taína
Pero quién descubrió a quién?
Eh, ya ves, para arriba tú ves
Y el peso que baja
Eh, ya ves, pobre ni se ve
Y la medicina
Eh, ya ves, camina al revés
Aquí no se cura
Eh, ya ves, ni un callo en el pie
Eh, ya ves, ay ki-iki-é
Y ahora el desempleo
Eh, ya ves, me mordió también
A nadie le importa, no
Eh, ya ves, pues no hablamos inglés
Ni a la Mitsubishi
Eh, ya ves, ni a la Chevrolet
Eh, ya ves, pa-rriba tú ves
Y el peso que baja
Eh, ya ves, pobre ni se ve
Y la delincuencia
Eh, ya ves, me pilló esta vez
Aquí no se cura
Eh, ya ves, ni un callo en el pie
Eh, ya ves, ay ki-iki-é
Y ahora el desempleo
Eh, ya ves, me mordió también
A nadie le importa, no
Eh, ya ves, pues no hablamos inglés
Ni a la Mitsubishi
Eh, ya ves, ni a la Chevrolet
Eh, ya ves, pa arriba tú ves
Y el peso que baja
Eh, ya ves, pobre ni se ve
Y la medicina
Eh, ya ves, camina al revés
Aquí no se cura
Eh, ya ves, ni un callo en el pie
Eh, ya ves, ay ki-iki-é
Y ahora el desempleo
Eh, ya ves, me mordió también
A nadie le importa, no
Eh, ya ves, pues no hablamos inglés
Ni a la Mitsubishi
Eh, ya ves, ni a la Chevrolet
La primera máquina de karaoke la introdujo el cantante Daisuke Inoue, pero el éxito fue un poco por casualidad, ya que la gente asistente a sus conciertos insistía en poder cantar junto a él, gracias al experimento interactivo tan novedoso. Cuando el cantante vió el gran potencial del invento, lo patentó en un primer modelo consistente en una máquina a la que había que echar una moneda para que funcionase
En América y Europa se hicieron bastante conocidos este tipo de actividades, sobre todo en los bares, cuyo público era mayormente joven. Principalmente, el corazón del canto al vacío son las máquinas de karaoke, las que constan de una pantalla, mecanismo de supresión de voz, lector de DVD’s, además del sistema de sonido. Al principio, las máquinas tenían un lector de cintas, pero luego se cambió a las clásicas cintas de DVD’s. Se han llegado a abrir lugares especiales en los que sólo se puede hacer karaoke, además de comer y beber. Sin embargo, hay otros lugares que no están dedicados completamente a prestar el servicio del karaoke, pero establecen algunos días de la semana para ofrecerlo. Hoy en día, las máquinas son mucho más modernas, con pantallas de alta definición y de gran tamaño, al igual que un sonido potente. De igual forma, existen concursos a nivel mundial de esto e, incluso, han llegado a ser televisados.