Ladrones Sueltos – No Le Dijo Nada

 

 

 

Ladrones Sueltos – No Le Dijo Nada

 

Salió apurada de su casa con su pollera corta
Él la esperaba en la parada hacía más de una hora y
No le dijo nada
Ella quería pasarla bien
No le dijo nada
Y se tomaron el 10
Sacó boleto doble hasta Palermo
Ella lo miró y creía comprenderlo
Y no le dijo nada
Ella quería pasarla bien
No le dijo nada
Y se bajaron del 10
Y era de noche y la abrazaba
Y no le dijo nada
Sintió su mano en la espalda
Y no le dijo nada
La acariciaba despacito
Y no le dijo nada
Y de repente llegó Tito
¡Qué cagada!
No le dijo, no le dijo
No le dijo, no le dijo nada
Nunca dijo, nunca dijo
Nunca dijo, nunca dijo nada
En el verano fueron juntos, fueron juntos a la playa
A él le gustaba ir a las rocas y ella nunca se negaba y
No le dijo nada
Ella quería pasarla bien
No le dijo nada
Ya no se portaban bien
Y la llevó a su cueva entre las rocas
Tenia un colchón, vino y vodka
Y no le dijo nada
Ella quería pasarla bien
No le dijo nada
Nunca se portaban bien
Y era de noche y la abrazaba
Y no le dijo nada
Sintio su mano en la espalda
Y no le dijo nada
La acariciaba despacito
Y no le dijo nada
Y de repente llego Tito
No le dijo, no le dijo
No le dijo, no le dijo nada
Nunca dijo, nunca dijo
Nunca dijo, nunca dijo nada
Dijo, no le dijo, nunca, nunca dijo no
Nunca, nunca dijo nada
No le dijo, no le dijo
No le dijo, no le dijo nada
Un día charlando se dio cuenta
Que ella nunca decía nada, yeh-yeh
Un día charlando y con mucha ternura
Le dijo, le dijo: «nena, vos sos muda»
Era muda, era muda
Era muda, la mina era muda
Nunca dijo, nunca dijo
Nunca dijo, nunca dijo nada
Dijo, no le dijo, nunca, nunca dijo no
Nunca dijo nada
No le dijo, no le dijo
No le dijo, no le dijo nada

 

La primera máquina de karaoke la introdujo el cantante Daisuke Inoue, pero el éxito fue un poco por casualidad, ya que la gente asistente a sus conciertos insistía en poder cantar junto a él, gracias al experimento interactivo tan novedoso. Cuando el cantante vió el gran potencial del invento, lo patentó en un primer modelo consistente en una máquina a la que había que echar una moneda para que funcionase

 

karaokes.com.ar

 

En América y Europa se hicieron bastante conocidos este tipo de actividades, sobre todo en los bares, cuyo público era mayormente joven. Principalmente, el corazón del canto al vacío son las máquinas de karaoke, las que constan de una pantalla, mecanismo de supresión de voz, lector de DVD’s, además del sistema de sonido. Al principio, las máquinas tenían un lector de cintas, pero luego se cambió a las clásicas cintas de DVD’s. Se han llegado a abrir lugares especiales en los que sólo se puede hacer karaoke, además de comer y beber. Sin embargo, hay otros lugares que no están dedicados completamente a prestar el servicio del karaoke, pero establecen algunos días de la semana para ofrecerlo. Hoy en día, las máquinas son mucho más modernas, con pantallas de alta definición y de gran tamaño, al igual que un sonido potente. De igual forma, existen concursos a nivel mundial de esto e, incluso, han llegado a ser televisados.